Un intérprete es una versión avanzada de un traductor. El traductor tiene tiempo de su lado. El intérprete debe poder presentar una versión confiable y precisa de lo que acaba de escuchar, y en tiempo real. El dominio sobre los dos idiomas, en el habla y la escritura es imprescindible. Como carrera, es decente. Lo único es que debe haber suficiente trabajo para justificar un puesto de tiempo completo, o debe haber una alta tasa de remuneración por el trabajo informal. Aquellos traductores que adquieran fluidez al hablar los idiomas en cuestión y que también puedan traducir material técnico y científico en ambos sentidos, tendrían éxito.
Sin embargo, he observado que los más exitosos son aquellos que son expertos en varios idiomas aliados.
Le recomendaría que continúe enseñando los idiomas en cuestión, ya sea en la universidad o en la universidad, o de forma independiente, para que permanezca siempre listo para la acción. Las reputaciones logradas de esta manera duran toda la vida.